El elemento que más importa en el estilo loft es el espacio vacío, pero además se define por el uso de entrepisos o dos o más plantas que separan las zonas principales con las demás habitaciones complementarias de la casa.
Las escaleras son primordiales ya que unen las plantas pero además de ello resulta un objeto decorativo de importancia en este estilo.
Los materiales que se usan en el estilo loft son goma, plástico, ladrillo, metal y cemento, los que se relacionan con los ambientes industriales o fabriles, que es de donde proviene la tendencia; en caso de armar un espacio loft en algún sitio como estos lo mejor es conservar la estructura original con sus vigas, columnas y paredes adaptándolas al diseño.
En la decoración loft se tienen que usar materiales, elementos y colores que respeten la amplitud de los espacios, por esto es que puede considerarse una decoración fría, pero depende de los diseños, objetos y tonalidades que se usen en la ambientación de estos hogares.
El estilo loft se complementa con el minimalista porque ambos respetan la amplitud y el uso mínimo de objetos, los ambientes son despojados y siempre tienen colores claros como los blancos, grises, azules, tierra, hueso y gamas de vainilla.
La iluminación es fundamental en los loft, por ello es que estos ambientes siempre tienen grandes ventanales y techos altos que permiten el ingreso de los rayos del sol, los que tienen que inundar los cuartos.
Si bien el estilo loft tiene una marcada estética industrial, hoy día se lo puede realizar combinándolo con otras tendencias para conseguir ambientes más cálidos y confortables, con mobiliarios de diseño y más color.
Los lofts son ideales para personas que viven solas o para quienes necesitan tener el trabajo en casa, ya que permite conciliar empleo y vivienda sin problemas. Un detalle a tener en cuenta es que para hacer las divisiones hay que evitar las puertas y paredes en exceso, y optar por paneles, telas, bibliotecas, entre otros.
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