Existen diferentes tipos de guardas con distintos motivos, colores, materias e incluso estilos; también se puede hacer sus propias guardas con un poco de habilidad y pintura.
Las guardas son especialmente recomendadas para decorar habitaciones infantiles porque se pueden encontrar con dibujos y colores vivos como también en tonos pasteles para los niños mas chicos.
Las guardas son ubicadas en forma horizontal sobre las paredes, se pueden colocar en la mitad o bien arriba cerca del techo o bien a la altura del zócalo del dormitorio.
Entre todas las guardas que se encuentran, las más comunes son las de papel porque son muy prácticas. Para ponerles es necesario:
Materiales:
-Guardas de papel
-Un adhesivo para pegarlas
-Una brocha
-Espátula
-Esponja
-Centímetro
-Un lápiz
Manos a la obra:
Medir la altura contando desde el suelo hasta donde se desea poner la guarda y hacer una marca con un lápiz o un una tiza. Es necesario hacer este paso con precisión y prolijidad para lograr buenos resultados.
Luego se corta el largo de la guarda que se desea para pegar en la pared e ir colocando la guarda en tramos no muy prolongados para que este prolija, antes de cortar la guarda dejar unos centímetros de más por las dudas.
Luego pasar el adhesivo por la pared con la utilización de una brocha, empezando desde el centro hacia los constados intentando que los bordes de la guarda estén con una cantidad considerable de pegamento.
Se comienza a pegar la guarda con prolijidad y una vez que se termine pasar la espátula desde el centro al extremo con el fin de sacar las posibles burbujas de aire y el adhesivo excedente. Al concluir con el primer tramo de la guarda se cortan las demás y se reitera el procedimiento con cada una.
Luego de colocar todas las guardas, se aconseja pasar una esponja húmeda a lo largo de toda la superficie para remover restos de pegamentos que pudrieran quedar.
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